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Blake Lively ha solicitado a un juez que desestime la demanda de difamación interpuesta por Justin Baldoni, quien la acusa de intentar dañar su carrera profesional. La actriz presentó una moción alegando que su denuncia de acoso sexual contra Baldoni está protegida por una ley de California que ampara las declaraciones sobre este tipo de conductas. Este movimiento legal ocurre días después de que Ryan Reynolds, esposo de Lively, también pidiera ser retirado del caso.
Baldoni, junto con su productora Wayfarer Studios, acusa a Lively y Reynolds de intentar "destruirlo" profesionalmente tras colaborar en un artículo del The New York Times que detallaba una denuncia por acoso sexual presentada por Lively. Sin embargo, los abogados de la actriz argumentan que su decisión de compartir públicamente su experiencia está respaldada por la ley y no constituye difamación.
El juicio, programado para marzo de 2026, promete ser un enfrentamiento mediático en torno a las acusaciones de acoso sexual y represalias. Mientras tanto, ambas partes mantienen sus posturas: Baldoni niega categóricamente las acusaciones, mientras Lively sostiene que su objetivo es defender su integridad profesional y personal.