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La salud de Bruce Willis sigue generando preocupación en Hollywood y entre sus millones de fanáticos. El actor, diagnosticado con demencia frontotemporal, habría mostrado sus primeros síntomas tras un accidente en el rodaje de Die Hard (1988), según reveló su esposa, Emma Heming Willis. Durante una escena de acción, el actor perdió parte de la audición, lo que con el tiempo derivó en dificultades para comunicarse, uno de los signos más evidentes de su condición actual.
Emma Heming compartió estos detalles en una entrevista reciente y en su nuevo libro Emma y Bruce Willis: El viaje inesperado, donde relata los momentos más difíciles tras el diagnóstico del protagonista de Duro de Matar. La desconexión en reuniones familiares, la reaparición de su tartamudez infantil y la pérdida de fluidez en las conversaciones fueron señales que encendieron las alarmas en su entorno más cercano.
Hoy, Bruce Willis permanece en un centro de cuidados especializados, decisión que su esposa tomó para garantizar el bienestar del actor y de sus hijas. “Es una de las decisiones más difíciles que tuve que tomar, pero sabía que Bruce habría querido eso para nuestras hijas por encima de cualquier cosa”, expresó Heming. Su historia ha conmovido al mundo entero y mantiene vivo el legado de uno de los íconos más recordados del cine de acción.