Los datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) del lunes mostraron que ahora hay un caso de la variante B.1.351 de COVID-19 en Florida.
La variante B.1.351 se identificó por primera vez en Sudáfrica. Apareció por primera vez en los Estados Unidos en enero. Al igual que las otras variantes, propaga el coronavirus más rápidamente, lo que puede provocar más casos de COVID-19.
Un puñado de otros estados también tienen casos de la variante sudafricana, incluidos Idaho, Illinois, Nevada, Nueva York, Tennessee, Texas, Washington, Washington D.C., California, Carolina del Norte, Virginia, Massachusetts, Maryland y Carolina del Sur.
El CDC no especificó en qué lugar de Florida se detectó la variante, pero el Departamento de Salud de Florida confirmó que se encontró en el condado de Hillsborough.
Un estudio de laboratorio reciente de Pfizer Inc / BioNTech sugiere que la vacuna COVID-19 actual de la compañía puede generar una respuesta de anticuerpos significativamente menos robusta contra la variante sudafricana del coronavirus.